Presiento que esta va a ser la ensalada estrella del verano.
Con este tiempo que estamos teniendo últimamente, parece que me he mudado de nuevo a Dublín. La verdad que estamos experimentando una primavera realmente extraña en Barcelona, supongo que la primavera al igual que el otoño se caracteriza por las lluvias y tormentas, pero es que está lloviendo 3-4 días a la semana, siempre los fines de semana y nada de llovizna, es una lluvia contundente. Debo decir que esto le va bastante bien a nuestros pantanos y nuestras reservas de agua, pues normalmente estamos en alerta por sequía, por lo que no me voy a quejar, y dejaré que la lluvia siga cayendo tan feliz. Además la temperatura es bastante buena, alrededor de los 20ºC, por lo que aun podemos aprovechar esos ratitos en los que el sol brilla para broncearnos y absorber la vitamina D tan necesaria.
Además otro punto positivo a favor de la lluvia es que estoy con un proyecto que me hace estar delante del ordenador muchas horas, y la mayor parte del día lo paso dentro de casa, por lo que estoy contentísima con la lluvia, me hace estar más hogareña y tener ese sentimiento de acogedor y comodidad, sin sentirme triste porque no puedo disfrutar de ese sol y ese calor. Así que por mí, la lluvia puede quedarse unas semanas más con nosotros 😛
A pesar de la lluvia, como he dicho la temperatura acompaña y yo he ido cambiando mi alimentación ajustándose a una más veraniega, más fresquita. He estado merendando batidos helados, disfrutando de las frutas con hueso como los melocotones, albaricoques y cerezas y degustando ricas ensaladas para comer.
La receta de hoy es una ensalada deliciosa y refrescante que me hice la semana pasada, y que seguro estará en mi mesa muchas más veces este verano. Tiene mucho verde, jugosa sandía, rico queso feta y un delicioso aliño de rúcula. Para hacerlo más contundente, podrías añadir quinoa, garbanzos o lentejas, y para una versión vegana simplemente cambia el queso feta por tofu.
La salsa de rúcula es simplemente un pesto hecho con rúcula en lugar de albahaca, lo que le da un delicioso sabor más potente, puedes hacerlo con otras hierbas, como cilantro o menta para darle un toque refrescante.
- 1 kg de sandía
- 200 g de queso feta o tofu para una versión vegana
- 150 g de tomates cherry
- 100 g de cuscús
- 60 g de semillas de calabaza
- 3 grandes puñados de tiernas hojas verdes mezclum
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- sal
- 1 gran puñado de rúcula
- 120 ml de aceite de oliva virgen extra
- 1/2 limón zumo
- 1 diente de ajo
- 50 g de parmesano o levadura nutricional para la versión vegana
- 1 puñado pequeño piñones
- 1/2 cucharadita sal marina
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Comience por preparar la salsa. Agregue todos los ingredientes de la salsa a un procesador de alimentos y procese hasta que se triture y obtengas un aliño bien picadito. Reserva.
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Prepare el cuscús siguiendo las instrucciones del paquete.
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Cortar a dados la sandía y desmenuzar el queso feta, cortar por la mitad los tomates. Tueste las semillas de calabaza a fuego medio hasta que empiecen a saltar, luego retírelas.
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Coloque la lechuga en un bol o en un plato para servir. Agregue cuscús, tomates, sandía y queso feta. Cubra con semillas de calabaza y salsa de rúcula. ¡A disfrutar!