Delicioso tronco de Navidad hecho con un bizcocho especiado que rápidamente te translada a ese espíritu navideño y que la crema de coco le da un toque muy exótico y fresco
Precalentar el horno a 160ºC. Forrar una bandeja para horno con papel vegetal
Calentar la leche e infusionar con el te de chai, dejar reposar unos 5 minutos para que se transfieran bien los sabores.
Mientras tanto, separa las claras de las yemas. Monta las claras a punto de nieve y reserva.
En un bol bate las yemas con el azúcar. Añade el aceite de oliva y mezcla bien.
Añade la leche infusionada y la mitad el contenido de la bolsita de te chai.
Agrega la harina y levadura tamizada y mezcla bien para que se integren todos los ingredientes.
Ahora con una espátula y con cuidado, agrega las claras poco a poco y mezcla con movimientos envolventes hasta que todas las claras estén bien incorporadas.
Vierte la mezcla sobre la bandeja de horno preparada, extiende la masa hasta que tenga como máximo un dedo de grosor.
Hornea unos 7-10 minutos, hasta que esté ligeramente dorado y al tocar la superficie se note esponjosa y firme pero elástica.
Esperar unos 5 minutos, cubrir con otra hoja de papel y dar la vuelta con cuidado para despegar el papel. Mientras sigue caliente, y con papel de horno en la parte de abajo y superior de la placa de bizcocho, enrollarlo. No es un paso imprescindible pero puede ayudar a que no se nos rompa a la hora de enrollarlo cuando se haya enfriado.
Es importante que la lata de leche de coco esté bien fría. Colócala en el refrigerador durante 1-2 días antes de hacer esta nata . Quieres que la crema se endurezca y se separe del agua de coco.
Abre la lata de leche de coco y saca la crema de coco endurecida con una cuchara en un bol. Vierte el agua de coco en un tarro separado y guárdalo para un batido.
Con una batidora de montar, bate la nata de coco durante un minuto. Agrega la miel y extracto de vainilla y mezcla durante un minuto más. Reserva
Para rellenar el tronco. Desenrollar la placa de bizcocho y cubrir con una capa generosa de nata de coco, reserva un poco para decorar, con cuidado de no pasarnos en los extremos más largos, y enrollar con suavidad, intentando que quede del mismo grosor en todas partes. Enrollaremos siempre por el lado más largo, con la ayuda del papel de horno que tenemos debajo.
Con cuidado, colocar el tronco en una bandeja alargada.
Decorar con lo que ha sobrado de nata de coco. Con las galletas de jengibre y espolvorea con canela y azúcar glass o harina de coco