Calabaza Asada con Za’atar, Espinacas y Cebada
Bueno, ya pasó el día de Navidad, y antes de pasar a la próxima gran celebración en unos pocos días, ¿que os parece si retomamos nuestra rutina saludable en estos días de tregua entre unas fiestas y otras?
Sí, porque seamos realistas, todos nos hemos sobrepasado con algunos dulces. Pero no te preocupes, se trata de equilibrio y de cómo respondemos a esos excesos. No se admiten culpas ni preocupaciones, volveremos a nuestro buen camino tan pronto como podemos.
Yo aprovecho los días entre festivos, son perfectos para volver a esas deliciosas sopas, ensaladas frescas y vibrantes, platos principales totalmente nutritivos y frutas o infusiones de hierbas como postre.
Esta calabaza asada con za’atar, espinaca y cebada de hoy es uno de esos platos súper abundantes y reconfortantes, perfecto para los días fríos de invierno, pero también lo puedes tomar frío como una rica ensalada (en este caso no saltearía la espinaca). Está cargado con ingredientes de temporada que se encuentran en su punto álgido nutricional.
La cebada es un cereal con un sabor particularmente rico a nuez y con una consistencia similar a la de la pasta. Es una excelente fuente de fibra que te hará sentir lleno durante más tiempo y mantendrá sano tu intestino. Previene la osteoporosis gracias a su alta cantidad de calcio, manganeso y cobre. La cebada también ayuda a preservar la elasticidad de la piel, mejora el funcionamiento de nuestro corazón, páncreas y sistema inmunológico.
En realidad me encanta la cebada, es uno de mis cereales favoritos. Su textura y sabor a nuez son excelentes para guisos y ensaladas y me divierto mucho masticando lentamente este grano.
Este es uno de mis comodines cuando quiero algo satisfactorio y nutritivo. Y tu, ¿cómo vuelves a los buenos hábitos después de las grandes fiestas?
Increíble comida cargado de bondad deliciosa.
- 1 calabaza pequeña cortada en cubitos
- 1 cucharadita de especia za'atar
- 1/2 cebolla roja en láminas
- 1 diente de ajo
- 1 puñado de semillas de calabaza
- 300 gramos de cebada cocida o 150 gramos crudos
- 3 puñados de espinacas baby frescas
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta negra
- 2 cucharaditas de tahin
- 1 cucharadita de vinagre de manzana
- agua
- sal
- pimienta negra
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Para asar la calabaza, coloque los dados en una bandeja de horno, rocíe con aceite de oliva y especias za'atar. Hornear durante 30-40 minutos hasta que esté tierna y un poco dorado.
Mientras tanto, poner una sartén a fuego medio-bajo. Cuando esté caliente, agregue el aceite de oliva, la cebolla en rodajas y el ajo y saltee hasta que la cebolla esté cocida.
Suba el fuego y agregue las semillas de calabaza por un par de minutos.
Si usa cebada cruda, enjuáguela y hierva en una olla con abundante agua. Si usa cebada ya hervida, agréguela a la sartén con la mezcla de cebolla y revuelva para cubrir bien la cebada con el aceite. Temporada.
Apague el fuego, agregue las espinacas, cúbralas y deje que se hagan con el calor restante.
Ahora prepara el aliño batiendo tahin, vinagre de manzana, agua, sal y pimienta. Agregue la cantidad de agua que necesite para hacerlo un poco más liquido.
Cuando la calabaza esté asada, agréguela a la sartén de cebada, revuelva y agregue el aliño.
Servir inmediatamente.