Sunny Buddha Bowl
La mía genial. Soleada, tranquila y relajada en Menorca, es todo lo que necesitaba después de un par de meses de locura en el trabajo. Así que me puse en modo vacaciones🌴😎 tan pronto como llegué al aeropuerto y espero que dure mucho a mi vuelta.
Algunos pueden pensar que mantener una rutina saludable durante las vacaciones es imposible. La verdad es que puede ser más difícil. Las vacaciones generalmente incluyen platos tradicionales cargados de azúcar; comemos más a menudo o si nos quedarnos en un hotel con pensión completa ya ni te cuento.
No permitas que estos «pequeños inconvenientes» arruinen todos los esfuerzos diarios que haces. Hace años, solía ver las vacaciones como el momento para complacer y comer todo lo que podía, lo que me llevaba a sentirme hinchado e incómoda después de unos pocos días. Así que aprendí a disfrutar de esos pequeños momentos, descubriendo alimentos locales, nuevos restaurantes, tradiciones, etc., pero aún cuidando de lo que como.
Las últimas veces que he salido me he alojado en apartamentos o casas equipadas. Me encanta disfrutar de las casas de otras personas y, como añadido adicional, puedo disfrutar de una cocina y mi comida si quiero. Aunque muchas veces es un gran reto. Es fácil cocinar en tu propia cocina, mis armarios están llenos de ingredientes, especias y toneladas de utensilios específicos, espiralizer, tamiz fino, licuadora … Pero cuando tienes que cocinar en otras casas, se convierte en toda una aventura!
Sunny Buddha Bowl
El primer día uso para ir al mercado local y cargar mi cesta con frutas y verduras frescas y locales, un par de ingredientes básicos como garbanzos cocidos, quinoa o almendras, para poder preparar una cena fresca nutritiva y deliciosa en poco tiempo. Las cocinas en casas de vacaciones suelen tener ingredientes básicos como aceite de oliva, vinagre, sal y, si tienes suerte, algunas hierbas secas. Así que en las vacaciones es cuando disfruto más, la cocina simple, saboreando el sabor natural de las verduras, por ejemplo.
Con mis tesoros del mercado, ayer pude crear estos coloridos cuencos con ensalada de quinoa, pepino picante, pimientos asados con cebolla y un huevo cocido para obtener más energía. Y hoy el almuerzo consistía en garbanzos con atún, y ensalada de pepino y zanahoria. Realmente no importa lo que pongas en tu bol si es equilibrado, fresco y natural. Incluso puedes ponerlo en un tupper para llevar y disfrutarlo en la playa, durante una caminata en la montaña o donde quieras.
- 100 gr quinoa
- 1 zanahoria rallada
- zumo de 1 limón
- 1 pepino en rodajas finas
- 1 chili
- 1 pimiento rojo
- 1 cebolla cortada en láminas finas
- 100 to mates cherry a la mitad
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- hojas de albahaca
- 1 huevo hervido
- 300 ml de agua o caldo de verduras
- sal
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Cocinera de quinoa. Enjuague la quinua con agua fría, escurra y coloque en una cacerola con 300 ml de agua o caldo de verduras. Llevar a ebullición, reducir el fuego y dejar hervir a fuego lento hasta que el líquido se absorba, 20 minutos aprox.
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Apague el fuego, cúbralo y déjelo reposar durante 5 minutos.
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Coloque la cebolla en rodajas, los pimientos rojos y la mitad de los tomates cherry sobre la bandeja del horno, rocíe con aceite de oliva y sal y tápelos durante 15-20 minutos a 180º.
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Mientras la quinoa se está cocinando y los pimientos están rostizados, prepare la ensalada de pepino mezclando rodajas de pepino, chile picado, albahaca picada, un chorrito de aceite de oliva y sal.
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Cuando la quinua esté cocida y fría, mézclala con zanahoria rallada, tomates picados, pepino y albahaca. Vierta un poco de sal, aceite de oliva y limón y mezcle bien.
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Tome un recipiente y coloque la quinua, ensalada de pepino, pimientos asados y cebollas y cubra con huevo hirviendo.
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¡Disfruta de comidas saludables mientras estás de vacaciones!